Reacciones Adversas
Comparando con el placebo, la incidencia de efectos adversos con la asociación loratadina-sulfato de seudoefedrina es similar, salvo el insomnio y la sequedad bucal que fueron más comunes con el compuesto activo. Otras reacciones adversas asociadas a la medicación y al placebo fueron cefalea y somnolencia. Las siguientes reacciones adversas han sido raras, en orden decreciente de frecuencia:nerviosismo, mareo, fatiga, náuseas, trastornos abdominales, anorexia, sed, taquicardia, faringitis, rinitis, acné, prurito, erupción cutánea, urticaria, artralgia, confusión, distonía, hiperquinesia, hipoestesia, disminución de la libido, parestesias, temblores, vértigo, rubor, hipotensión ortostática, aumento de la sudación, trastornos oculares, dolor de oído, tinnitus, anormalidades del paladar, agitación, apatía, depresión, euforia, paranoia, aumento del apetito, cambios en los hábitos intestinales, dispepsia, eructos, hemorroides, decoloración de la lengua, trastornos de la lengua, vómitos, alteraciones transitorias de la función hepática, deshidratación, aumento de peso, hipertensión, palpitaciones, migraña, broncospasmo, tos, disnea, epistaxis, congestión nasal, estornudos, irritación nasal, disuria, trastornos de la micción, nocturia, poliuria, retención urinaria, astenia, dolor de espalda, calambres, malestar y rigidez en las piernas. Durante la comercialización de la loratadina en raras ocasiones se informaron casos de alopecia, anafilaxis, anomalías de la función hepática y taquiarritmias supraventriculares.
Farmacocinética
La loratadina, tras su administración oral, es rápida y bien absorbida en el tracto digestivo, experimentando una importante metabolización de primer pasaje. La loratadina es metabolizada en diferentes metabolitos, uno de los cuales (decarboxietoxiloratadina) es farmacológicamente activo y en gran parte responsable de la prolongada actividad del fármaco. La loratadina es fuertemente ligada a las proteínas plasmáticas (97% a 99%); su metabolito activo lo hace en menor proporción (73% a 76%). La vida media de distribución plasmática de la loratadina es de alrededor de una hora, y la vida media de eliminación de unas 12 horas; para el metabolito activo, estos tiempos se elevan a 2,3 horas y alrededor de 20 horas, respectivamente. Alrededor del 40% de la dosis es excretado en la orina y el 41% en las heces durante un período de 10 días, y esto principalmente bajo la forma de metabolitos conjugados. La loratadina y su metabolito activo son excretados en pequeñas cantidades en la leche materna. El sulfato de seudoefedrina, después de su administración oral, es rápida y completamente absorbido en el tracto digestivo. Comienza a actuar dentro de los 30 minutos siguientes a su administración y una dosis de 60mg tiene una duración de 4 a 6 horas. El sulfato de seudoefedrina experimenta una metabolización parcial a nivel hepático donde es transformado en metabolito inactivo por N-desmetilación. En el hombre y a un pH urinario de alrededor de 6, su vida media de eliminación varía de 5 a 8 horas. La sustancia y su metabolito son excretados por vía urinaria, eliminándose bajo forma inmodificada del 55% a 75% de la dosis administrada. La cinética de excreción es acelerada y la duración de acción disminuida, en caso de acidificación de la orina (pH=5). En caso de alcalinización de la orina, tiene lugar una reabsorción parcial. Se presume que la seudoefedrina atraviesa la barrera placentaria y la barrera hematoencefálica. La sustancia también puede pasar a la leche materna.